Nuestras respuestas a sus preguntas más frecuentes.
El coste varía según el tipo y la potencia del sistema. Por ejemplo, una bomba de calor de 5 kWh cuesta desde aproximadamente 7,000 €, mientras que una de 12 kWh puede llegar a los 20.000 €.
Una bomba de calor es un dispositivo que transfiere calor desde una fuente natural (aire, agua o suelo) al interior de un edificio, utilizando un ciclo termodinámico compuesto por evaporación, compresión, condensación y expansión.
Las ventajas incluyen la eficiencia energética y la reducción de emisiones. Las desventajas pueden ser el coste inicial elevado y la necesidad de un buen aislamiento en el edificio.
La duración media de una bomba de calor es de unos 15 a 20 años, dependiendo del mantenimiento y del uso.
Existen varios tipos, como aire-aire, aire-agua, agua-agua y geotérmicas, cada una con características y aplicaciones específicas.
El consumo depende del tipo de bomba y del uso. Sin embargo, las bombas de calor suelen ser más eficientes que los sistemas tradicionales, con un COP (coeficiente de rendimiento) que puede variar entre 3 y 5.
Sí, pero es importante comprobar que la temperatura de impulsión de la bomba sea compatible con los radiadores. En algunos casos, podría ser necesario sustituirlos por sistemas de baja temperatura.